Negocios de funcionarios de la Aduana que salpican a Stiuso
Interna en la ex SIDE - Dos altos directivos con empresas en Brasil y mansión en Buzios tienen nexos con el ex jefe de contrainteligencia.
La propiedad de Salvi, con vista a la laguna de Ossos.
- Nicolás Pizzi
La muerte de Alberto Nisman expuso como nunca las internas dentro de la ex SIDE, pero la guerra había comenzado mucho antes. El 9 de noviembre, Clarín publicó una investigación sobre los negocios irregulares de dos funcionarios de la Aduana en Brasil. Apenas tres días después, Jaime Stiuso denunció a Allan Bogado (uno de los acusados por el fiscal Nisman). Lo acusó de usar el cartel de la SIDE, sin pertenecer a “La Casa”. El Gobierno aprovechó esa denuncia para argumentar que Bogado no pertenecía a la Secretaría de Inteligencia, aunque hay decenas de testimonios que lo confirman. ¿Por qué una nota sobre los negocios oscuros en la Aduana desató semejante interna? La investigación arrojó nuevos datos para encontrar la respuesta.
Los dos investigados son Damián Sierra (un alto funcionario de la Aduana que está en pareja con la ex titular de ese organismo, Silvina Tirabassi) y Gerónimo Oscar Salvi, también con varias décadas en esa repartición. Este diario reveló en noviembre que tuvieron una lujosa posada en la ciudad de Buzios. Y que utilizaron dos sociedades para ese negocio millonario: Camey y DAOS (por las iniciales de sus dueños). Pero hay más: Salvi y Sierra también están vinculados a la sociedad “Paraty Turismo e Comercio”, dedicada al turismo local. La empresa fue creada el 7 de mayo de 1998 y sigue operativa, según documentos oficiales a los que accedió Clarín.
Paraty actualmente funciona como una agencia de turismo en el centro histórico de esa ciudad, a unos 300 km de Río de Janeiro. La sociedad comparte varios datos con Camey, la otra firma utilizada para construir una posada de 26 habitaciones en la exclusiva playa João Fernandes, en Buzios. Los dos funcionarios de la Aduana también compraron una lujosa casa en la playa Azeda, un sector exclusivo de Buzios. La propiedad está bajo el cuidado de sus caseros y es visitada asiduamente por la familia Salvi. Según sus vecinos, tiene al menos cinco habitaciones y una pileta en la parte trasera con una vista envidiable a la laguna de Ossos. La mujer de Salvi, Manuela Elizabeth Schiumerini, también se dedica a los negocios turísticos en la Argentina. Según la base de datos comerciales Nosis, en 2007 creó la sociedad New Tourist SRL, dedicada a los viajes de turismo, junto a Roberto Salvi. Schivmerini, aparece mencionada en uno de las causas judiciales que hay en Brasil contra Camey. Esa sociedad fue acusada de no pagar impuestos y de falsificar la firma a un funcionario.
Semanas después que Clarín revelara la primera parte de esta investigación, el titular de la AFIP Ricardo Echegaray le prohibió a todos los funcionarios de esa repartición (están incluidos los de Aduana) que sean socios o accionistas de empresas argentinas y extranjeras. Ninguna de las sociedades fueron declaradas por los dos funcionarios involucrados en sus últimas declaraciones juradas.
Sierra y Salvi, investigados por la “Mafia del Oro” en la década de los 90´, tienen una estrecha relación con el ex jefe de Operaciones de la SIDE, Jaime Stiuso, quien abrió un sumario interno en octubre pasado por la primera crónica de esta investigación. Fuentes de la Aduana revelaron ayer a este diario que también se los vincula a Daniel Santanna, subdirección General de Operaciones Aduaneras Metropolitanas. Ese funcionario comenzó su carrera en Iguazú (Misiones), donde pasó de ser chofer a administrador de la Aduana local. Clarín se comunicó ayer con las autoridades de la Aduana, pero ningún funcionario respondió los llamados.
